RELATOS DE VIAJES
¿Un crucero con papá por los Emiratos y Omán? ¡Claro que sí!
Una doble entrevista con Alberto, Ludovica y la hermana pequeña, Alice. Nos cuentan cómo pasaron unas Navidades poco convencionales bajo el sol de tierras lejanas...
¿Por qué Emiratos y Omán?
Alberto: Es un destino que no conocíamos, con una cultura muy diferente... teníamos mucha curiosidad por descubrirlo.
El crucero nos permitió viajar y hacer muchas excursiones sin tener que preocuparnos de nada.
¿Qué cosas son imprescindibles en un crucero?
Alberto: Las excursiones son algo esencial. Es importante que haya excursiones tan completas que te sientas inmerso en la realidad local, disfrutes de sus gentes, de todos los lugares, desde los oasis del desierto hasta la vida urbana de Dubái. Cada cosa que descubres te enriquece. Luego está el barco, que es el medio ideal para viajar a lugares lejanos cómodamente por la noche, con la mejor gastronomía y disfrutando de las mejores vistas.
Ludovica: A bordo nos sugirieron las excursiones más adecuadas para nosotros ¡y acertaron!
¡Cuéntanos que tal fueron vuestras excursiones!
Alberto: El campamento beduino en el desierto me pareció increíble, quizá porque fue la primera excursión. Y la subida en ascensor al rascacielos Burj Khalifa fue brutal también.
A ti Ludovica ,que te encanta la arquitectura, ¿qué fue lo que más te impactó?
Ludovica: La Gran Mezquita del Jeque Zayed en Abu Dhabi es espectacular. Nunca había visto tantas piedras preciosas engarzadas en columnas.
Habrás dado mucha envidia con tus fotos a tus amigos en Instagram....
Ludovica: ¡Jaja, un poco!
¿Disfrutásteis a bordo de Costa Toscana?
Ludovica: A mi hermana y a mi nos encantaba subir a la cubierta y a otras zonas del barco a tomar el sol. Mientras, papá aprovechaba para recorrer otras zonas del barco ¡volver bronceados a un Turín gris con lluvia fue fantástico!
En resumen, pleno verano en diciembre...
Alberto: El único día que no llevé el bañador puesto, quedó inmortalizado en una foto con mis vaqueros remangados, justo a medio camino entre Sanpei e Indiana Jones, en el fiordo de Omán.
¿En qué tipo de camarote viajaste?
Alberto: Camarote con balcón, que disfrutamos mucho cuando volvíamos por la noche, sobre todo por las vistas.
Ludovica, ¿qué clase de viajero es tu padre?
¡Un buen compañero de viaje! Nos dió mucha libertad, no fue demasiado protector ni miedoso ¡al contrario, nos animó a explorar, a aprender, a ver! Y gracias a él nunca llegamos tarde a nuestras excursiones...es el más puntual de los tres.
Alberto, ¿qué descubriste de tu hija durante el viaje?
Descubrí muchas cosas en contextos diferentes, por ejemplo la vi muy curiosa, animada ¡y alejada del móvil! Tenía miedo de que se aburriera, pero para nada. Hicimos las excursiones, las comentamos entre nosotros o con otros pasajeros, y una vez de vuelta a casa, sé que lo compartió todo con sus amigos... en resumen, captó el sentido de este crucero. Lo pongo en el top 5 de nuestras vacaciones juntos.
Entonces, ¿haréis otro crucero?
Alberto: El que hace los fiordos del Norte de Europa nos llama la atención. Y si Costa hiciera alguna vez un crucero por el Nilo... ¡ya estaríamos a bordo!
Y vuestra opinión como buenos italianos... ¿qué tal el café?
Ludovica: El café era muy bueno y aromático, sobre todo en Omán, ¡en otros viajes el café suele ser penoso!
¿Fuiste a Archipelago?
Alberto: Por supuesto, ¡probamos todos los menús! A bordo están los mejores restaurantes que puedas probar, en serio.
¿Habéis hecho amistades a bordo y conocido personas con las que sigues mantenido el contacto?
Alberto: Las chicas hicieron amistad con algunos pasajeros y volvieron con un inglés muy bueno. En este crucero hablamos realmente con gente de todo el mundo.
Sinceramente: ¿Recomendarías el crucero a tus amigos?
¡Ya lo hemos hecho!
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